Sumario: | Para mantener la calidad de los ajos,
evitando principalmente las pérdidas postcosecha
por brotación, ataque de agentes
patógenos y evaporación de agua, se consideraron
distintas modalidades de conservación:
tradicional, a campo en caballete; en
galpón y en frigorífico a 10, 0 y -3 °C.
El ensayo duró 9 meses a partir de la
cosecha. Durante el mismo se analizaron los
bulbos colocados en cada modalidad de conservación,
comparando: % de defectos, índice
de brotación, color, pérdida de peso,
sólidos totales, humedad, cenizas, acidez,
pH y sólidos solubles.
• Porcentaje de defectos: al noveno mes
y temperaturas de 0 °C y -3 °C, presentaban
70 y 62 %, respectivamente, de
ajo en buenas condiciones.
• Índice visual de superación de dormición:
al séptimo mes y -3 °C la media fue
34,56 %. A 0 °C, 83,33 %.
• Peso: su pérdida fue menor en los últimos
meses de conservación a -3 °C.
En consecuencia, para un período corto
de conservación (hasta 3 meses, dependiendo
de las condiciones ambientales) son utilizables las modalidades campo o galpón.
Para períodos más largos, es conveniente
usar refrigeración a 0 °C, o mejor -3 °C, condición
en la cual los ajos no brotaron.
|