El artículo analiza las trayectorias universitarias desiguales de los jóvenes ecuatorianos en España y Ecuador durante la crisis centrándose en sus estrategias de movilidad y la de sus familias en relación a las políticas públicas. Se examinan los recorridos de tres grupos: las hijas e hijos de la migración de los 2000, los retornados a Ecuador y los que llegan a España con ayudas del gobierno ecuatoriano para realizar postgrados. Se emplea una metodología cualitativa basada en entrevistas, grupos de discusión y una encuesta a los participantes de la prueba de acceso en España a universidades públicas ecuatorianas. Mientras el primer grupo intenta mantenerse en la universidad degradando sus expectativas, para el segundo la educación forma parte de una estrategia que descansa en las redes transnacionales tejidas durante más de una década de migración hacia España. Los integrantes del tercer grupo han seguido trayectorias heterogéneas ascendentes que incluyen el desplazamiento.