Sumario: | Desde la instalación de los diferimientos Impositivos en la región se han producido importantes cambios en la estructura productiva, principalmente sobre las condiciones en que se desarrolla el empleo rural en los mismos. Estos se establecieron en la provincia desde 1993, dentro de las políticas neoliberales, consisten en extensos establecimientos manejados por el gran capital, que ha gozado durante muchos años de exenciones impositivas nacionales.
Las condiciones del empleo de los trabajadores rurales, pareciera ser confusa y
polémica desde el primer paso, que es la forma de registrarlos. También en la cantidad
de obreros empleados en relación a los ocupados por los pequeños productores, a sus
formas asociativas, sus beneficios sociales, su calificación y otros aspectos, ya resultan
arduos para consignar en las EAPS (Explotaciones Agropecuarias) con cierta tradición.
Desplegar esta tarea investigativa en enormes empresas como son los
diferimientos impositivos puede transformase en una labor mucho más difícil, toda vez
que estos espacios parecen manejarse con reglas propias y sospechadas de escasa
transparencia.
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