Sumario: | La revolución de 1930 es considerada por la historiografía como el mito fundamental del fascismo argentino, expuesto, particularmente, en una ideología corporativista y en un proyecto constitucional que pretendió instaurar el corporativismo. Contra esta visión, en el trabajo se sostiene que se trató en realidad de un movimiento conservador y liberal, a pesar de las influencias nacionalistas en sus orígenes, pero antirradical y anti yrigoyenista, defensor del sistema partidocrático. Para ello el autor ha recurrido a las fuentes de la ideología revolucionaria (Gral. Uriburu, Matías Sánchez Sorondo, Carlos Ibarguren, Juan Carulla, La Nueva República, etc.), y a los proyectos y documentos de corte legislativo y constitucional de la misma revolución (Manifiesto de la reforma constitucional, Decreto de 4 de agosto de 1931, etc.), con el propósito de refutar los errores ideológicos de la historiografía reinante.
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