Sumario: | Maryse Condé toma de la historia y de la literatura el personaje de Tituba, negra esclava bruja, y le da una voz para inventar y narrar en un “relato de esclava" (sclave narrative) – en clave de seudo-autobiografía-- su vida olvidada. Moi, Tituba… reproduce la odisea canónica del “mito del héroe": exilio-iniciación-regreso. En su derrotero hacia la heroización, Tituba traza también el doble movimiento del “viaje del héroe": katábisis o descenso a los infiernos, y anábasis o ascenso a la figura emblemática de heroína inmortal. Su recorrido la lleva finalmente a su Ítaca en la que muere, alcanza la apoteosis y gana la inmortalidad al ser cantada –según la cultura a la que pertenece- como modelo de liberación de una raza maldita. Nos proponemos seguir esta travesía en sus diferentes etapas.
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