Sumario: | La soja es una oleaginosa ampliamente conocida como fuente de proteínas de origen vegetal de
alta calidad, y por los beneficios que derivan de su consumo.
La introducción del cultivo en Argentina hace más de 30 años fue acompañada de iniciativas de
difusión de sus aplicaciones alimentarias con grados variables de aceptación y adopción.
La utilización de la soja en programas de asistencia nutricional, ha vuelto a ser muy difundida en
los últimos años en nuestro país, respondiendo a la crítica situación económica. Estos programas
tienen vigencia en la provincia de Mendoza, y benefician a comedores comunitarios y merenderos
a los que se les entrega gratuitamente harina o bien granos; con destino a la elaboración de
comidas nutritivas y económicas para ser distribuidas a los sectores carenciados de la población.
En el marco descripto, se planteó como objetivo formular un alimento en forma de medallones
tipo hamburguesa, de elevado valor nutricional, principalmente proteico, elaborado con una
mezcla de harina de trigo (deficitaria en lisina) y harina de soja (deficitaria en aminoácidos
azufrados) como ingredientes principales, obteniendo así una complementación proteica (Badui
Dergal, 2006).
Teniendo en cuenta la aceptación generalizada en el consumo de las hamburguesas y milanesas
de carne tradicionales, surgió la idea de tratar de elaborar un alimento similar en apariencia, que
fuese atractivo y pudiera prepararse de un modo sencillo y que requiriera poco tiempo de cocción.
Así, un medallón de soja, ya sea refrigerado o congelado puede ser cocido en horno, plancha o
sartén, de acuerdo a la preferencia del consumidor, y en pocos minutos estar servido en el plato;
como una comida rápida, tan buscada actualmente. Se trata de un alimento fundamentalmente de
elevado valor proteico, económico y de características organolépticas deseables, para ser
incorporado como plato principal en la dieta cotidiana de la población.
En el presente trabajo además del desarrollo detallado del producto se determinó la composición
centesimal de los medallones. Con los resultados obtenidos, se confeccionó la correspondiente
tabla de información nutricional. La misma refleja que cada unidad aporta entre el 6-8% del
requerimiento energético y 10-12% de la Dosis Diaria Recomendada de proteínas. Es decir, se
obtuvo un alimento de alto valor energético y proteico.
El análisis microbiológico permitió estimar el lapso de aptitud para su consumo, que fue de 7 días
para los medallones refrigerados (4-8°C) y de 45 días para los congelados (-18°C).
Finalmente, la aceptación del producto por parte de la población afectada a los planes
nutricionales, se determinó a través de pruebas de análisis sensorial. El 88% de los consumidores
manifestó su agrado hacia las muestras degustadas, y el 69% prefirió la variedad rebozada frente
a la sin robozo.
Se logró obtener un alimento de alto valor nutricional, recomendado para merenderos, fácil de
elaborar, tal como quedó demostrado en el taller de capacitación. Las madres asistentes
realizaron los medallones en sus hogares y los consumieron satisfactoriamente.
|