Sumario: | La Historia Tradicional considera el documento escrito oficial como la única fuente autorizada para estudiar el pasado. La Nueva Historia, en cambio, ha incorporado otras, igualmente válidas a la hora de investigar lo acontecido. Entre ellas, podemos mencionar las imágenes y los testimonios orales, entre otros recursos, que permiten ampliar el conocimiento de lo sucedido. En este artículo, realizamos un estudio sobre la propaganda antisemita nazi respecto del Holocausto. Proponemos mostrar la riqueza del uso de las imágenes (afiches, ilustraciones de libros y fotograflas) como registros del pasado y reflexionar sobre cómo los testimonios rescatan la memoria de los protagonistas de esa época que marcó, indudablemente, la historia del siglo XX. Concluimos que tanto imágenes como testimonios constituyen rastros invaluables de una era traumática, cuyo análisis ayuda a comprender la ideología del III Reich y complementan la explicación histórica del Holocausto.
|