¿Por qué todos los caminos conducen a la miseria del panóptico?

La seguridad ciudadana, como política pública, no puede limitar las libertades individuales. De allí que ninguna de las tres instituciones públicas como dispositivos disciplinarios (Foucault, 1989) –policía, justicia y cárcel- puedan violar ningún derecho y mucho menos el de la libertad, porque éste...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Carrión Mena, Fernando
Formato: Artículo
Lenguaje:Español
Publicado: FLACSO sede Ecuador. Programa Estudios de la Ciudad 2007
Materias:
Acceso en línea:http://hdl.handle.net/10469/81
Descripción
Sumario:La seguridad ciudadana, como política pública, no puede limitar las libertades individuales. De allí que ninguna de las tres instituciones públicas como dispositivos disciplinarios (Foucault, 1989) –policía, justicia y cárcel- puedan violar ningún derecho y mucho menos el de la libertad, porque éste prevalece sobre la seguridad, tanto que es un derecho humano que debe ser protegido legal e institucionalmente. Sin embargo, el sistema penal lo hace y al hacerlo trastoca la ecuación: pone la seguridad por sobre la libertad; la carreta delante de los bueyes…