Sumario: | Desde 2010, los canales de comercialización de productos orgánicos en la ciudad de Cusco, en el sur de los Andes peruanos, se multiplican y se diversifican: ecoferias, tiendas especializadas, biocanastas, venta directa a los restaurantes, etc. La demanda se origina en gran parte en turistas y residentes extranjeros, además de algunos residentes peruanos. Dentro de estas experiencias, algunas están vinculadas a los principios de la economía social. En este artículo, estudiaremos en qué medida consiguen aplicarlos e intentaremos evaluar los impactos socioeconómicos de estas iniciativas en el territorio. Por un lado, nuevas relaciones comerciales y sociales se concretizan, por otro lado, son propuestas todavía marginales y frágiles: reúnen pocos productores, cuentan con problemas de organización, carecen de apoyo público y de procesos de certificación, etc. Estas limitantes podrían cuestionar la sostenibilidad de estas iniciativas y su orientación social. No obstante, en estas dinámicas incipientes, se vislumbran soluciones.
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