¡Qué diablos!
La Procesión va por dentro, dentro del cuerpo; las emociones nos recorren, inmensas, indescifrables, se vuelven espíritus, animales aliados o demonios.
Autor principal: | |
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Formato: | Artículo |
Lenguaje: | Español |
Publicado: |
Quito : FLACSO Sede Ecuador
2012
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Materias: | |
Acceso en línea: | http://hdl.handle.net/10469/3948 |