Sumario: | La situación de las personas sin hogar, que viven en condiciones de extrema precariedad de vivienda o que viven en la calle constituye una crisis global de derechos humanos, inclusive en Estados que tienen los recursos disponibles para enfrentar este fenómeno. Este tema, sin embargo, ha estado ampliamente ausente de las discusiones sobre rendición de cuentas en materia de derechos humanos, y rara vez ha sido tratado como una violación de derechos humanos que requiere medidas positivas para su eliminación y para prevenir su repetición. Si bien las estrategias para prevenir que personas vivan sin hogar o en situación de calle son más frecuentes en años recientes, algunas de ellas han fracasado en su objetivo de abordar la situación de calle y la extrema precariedad de la vivienda como una violación de derechos humanos, y pocas han creado mecanismos de monitoreo, cumplimiento o remediación.
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