Sumario: | El maíz, alimento esencial de muchos pueblos Meso y Suramericanos fue divinizado por esas culturas. Los taínos cultivaron esta importante gramínea antes de la conquista hispánica de donde lo llevaron a España. Con la llegada de los esclavos africanos a Cuba, el maíz constituyó uno de los alimentos cotidiano que el esclavista le proporcionaba. Por las enormes bondades que este cereal le brindó en su desventura entre otros motivos, los esclavos africanos inquietos observadores de la Naturaleza y dentro de ella las plantas en particular, lo consideran como un componente apreciado para sus ceremonias y ritos religiosas. Este trabajo pretende mostrar algunos elementos de su representación mágica en la Regla Ocha o santería, una de las expresiones de origen africano de mayor arraigo popular en el país.
|