El progresismo ecuatoriano en el siglo XIX. La reforma del presidente Antonio Flores (1888-1892)

La corriente política denominada progresismo en el siglo XIX ecuatoriano, una suerte de "tercera vía" distante de liberales y conservadores, se origina a mediados de siglo como proyecto republicano opuesto al autocratismo de Gabriel García Moreno. Luego del asesinato del mandatario, obtien...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: María Cristina Cárdenas Reyes
Formato: artículo científico
Lenguaje:Español
Publicado: Instituto de Investigaciones en Ciencias Sociales y Humanidades 2007
Materias:
Acceso en línea:http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=12701803
http://biblioteca-repositorio.clacso.edu.ar/handle/CLACSO/34611
Descripción
Sumario:La corriente política denominada progresismo en el siglo XIX ecuatoriano, una suerte de "tercera vía" distante de liberales y conservadores, se origina a mediados de siglo como proyecto republicano opuesto al autocratismo de Gabriel García Moreno. Luego del asesinato del mandatario, obtiene a fines de siglo un amplio reconocimiento en la esfera pública, movilizando un ideario reformador en que la categoría de progreso aparece como ideología, proceso y finalidad social. Alcanza su punto culminante con la presidencia de Antonio Flores en 1888, un católico liberal de formación europea apoyado desde Roma por el papa León XIII. Las reformas secularizantes de Flores originan su rechazo frontal por los depositarios del legado garciano, encabezados por la Iglesia ecuatoriana, y no llegan a concretarse en transformaciones institucionalizadas. La revolución liberal de 1895 en el país será en buena medida deudora de los avances impulsados por la corriente progresista