Estudio de la violencia obstétrica: una noción invisible en el marco jurídico y jurisprudencial de la responsabilidad médica en Colombia

El embarazo y el parto, son momentos de gran vulnerabilidad de la mujer, por cuanto se encuentra en una posición de indefensión frente al trato de los profesionales de la salud. De ahí, que la violencia obstétrica es el resultado de aquellas conductas de maltrato verbal, incluso físico o falta de at...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Rivera León, Danna Carolina
Otros Autores: Ruíz Alarcón, Ruth Adriana
Formato: info:eu-repo/semantics/bachelorThesis
Lenguaje:Español
Publicado: Universidad Autónoma de Bucaramanga UNAB 2020
Materias:
Acceso en línea:http://hdl.handle.net/20.500.12749/11929
http://biblioteca-repositorio.clacso.edu.ar/handle/CLACSO/18137
Descripción
Sumario:El embarazo y el parto, son momentos de gran vulnerabilidad de la mujer, por cuanto se encuentra en una posición de indefensión frente al trato de los profesionales de la salud. De ahí, que la violencia obstétrica es el resultado de aquellas conductas de maltrato verbal, incluso físico o falta de atención de personal médico especializado y demás profesionales de la salud, inferidas a la mujer en estado de gestación, parto o posparto. Las autoridades competentes ante estas circunstancias hacen caso omiso, excluyendo a las mujeres embarazadas de manera consiente e inconscientemente, en la medida en que estos comportamientos no se encuentran tipificados en la ley. Este tipo de violencia excede lo físico y lo verbal. Ello, en la medida en que el equipo médico y la propia institución violenta a la mujer realizando procedimientos de forma rutinaria, sin indicaciones clínicas justificadas, sin informar ni ser consentidos por la mujer en gestación. Entre los procedimientos más frecuentes están: inducir con oxitocina el parto, realizar enema, rasurado, múltiples exámenes vaginales, diferentes examinadores. Asimismo, imponer el decúbito dorsal obligatorio imposibilitando el libre movimiento. Hacer episiotomía o realizar la maniobra de Kristeller. Practicar cesárea cuando hay condiciones para el parto natural. Prohibir la compañía de la familia durante el trabajo de parto. No brindar información adecuada y oportuna, incumpliendo con las normas que rigen el consentimiento informado.